Durante las pesquisas, el Ministerio Público estableció que Plácido Hernández Castillo (Gregory o Gregorio), hoy condenado, se desplazaba por el citado lugar en su vehículo, un carro marca Toyota, modelo Corolla S, color blanco, del año 2013, en compañía de otras personas que se transportaban a bordo de motocicletas.
El expediente acusatorio señala que el grupo, al notar la presencia del Ministerio Público y de la Policía Nacional, huyó del lugar, dejando abandonado el cargamento de municiones calibre 7.62 x 39 milímetros. Posteriormente, Hernández Castillo fue arrestado tras la ejecución en su contra de una orden judicial.
El Ministerio Público, representado por la fiscal litigante Angelina Valdez Cabrera, demostró al tribunal, de manera irrefutable, la culpabilidad del hoy condenado, quien con sus acciones faltó a varios artículos del Código Penal Dominicano y la Ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados, que, entre otros, sanciona la tenencia ilegal de municiones.
Los jueces del Tribunal Colegiado, Edward Gerónimo, Blaury Luciano y Saulys González, dispusieron que Hernández Castillo cumpla la condena en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) de Elías Piña, así como el pago de una multa de cincuenta salarios mínimos y el decomiso del vehículo y las municiones que les fueron incautadas.